"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a Su Hijo unigénito (único), para que todo aquél que cree en El, no se pierda, sino que tenga vida eterna." Juan 3:16
¡No hay tiempo qué perder! ¡Obtén tu salvación ahora!
Para lograrlo sólo tienes que creer que él es tu Señor y Salvador. Confesar con tu boca que él murió por ti. Que estás dispuesto a entregarle tu vida, tus decisiones, tu corazón… y ¡Él te dará el mismo galardón que Él me ha prometido a mí! El señor te ama, y Él es fiel a sus promesas.
Recuerda que el apóstol Santiago nos dice:
“Tú crees que hay un solo Dios, y en esto haces bien; pero los demonios también lo creen, y tiemblan de miedo.”
Santiago 2:19
“Yo soy bueno, no le hago mal a nadie. Le doy a los pobres y ayudo al necesitado. Yo hago el bien”. Tengo para decirte que eso está muy bien, pero…¡No son tus obras las que te salvarán!
“Pues por la bondad de Dios han recibido ustedes la salvación por medio de la fe. No es esto algo que ustedes mismos hayan conseguido, sino que les ha sido dado por Dios. No es el resultado de las propias acciones.”
Efesios 2:8
Es sólo por la fe en Jesús que puedes lograr tu salvación. La Biblia nos enseña que las buenas obras son un producto de la salvación. Las obras que haces antes de entregarle tu vida a Cristo no te sirven de nada. Las que tienen valor son las que haces después que Jesús mora en ti. – éstas vienen después, no antes.” En Isaías 64:6 la Biblia nos dice:
“Todas nuestras obras son como un trapo sucio”
Isaías 64:6
“Tú llega al Cielo a tu manera que yo llegaré de la mía.”
Pero les imploro que concideren lo siguiente ¿Nacimos en la forma que quisimos o a través de nuestra madre? Pues para llegar al Cielo también hay una sola forma:
“Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”
Juan 14:6
No teman a los que pueden darles muerte, pero no pueden disponer de su destino eterno (refiriéndose a Satanás); teman más bien al que puede darles muerte y también puede destruirlos para siempre en el infierno (¡refiriéndose a Dios Todopoderoso!).
El único pecado que Dios no te perdonaría es haber blasfemado en contra del Espíritu Santo, y si tú lo hubieses hecho, puedes estar seguro que ni siquiera hubieras terminado de leer estas líneas que ahora te escribo. De una cosa sí estoy seguro… El Señor te promete lo siguiente:
“Cree en el Señor, y serás salvo tú y tu casa.”
Si te encuentras en Puerto Rico area metro puedes visitar nuestra Iglesia que esta ubicada en Saint Just, Carolina. Si deseas mas informacion puedes escribirle a nuestra Pastora Alma Miro alma_miro@hotmail.com. De lo contrario hay iglesias evangélicas y algunas otras protestantes en las que estoy seguro que estarían más que honrados en recibirte. Acércate a cualquiera de ellas y de seguro no te ignorarán. Estudia la palabra, para que seais engañado, dice el Señor mi pueblo perece por falta de conocimiento.
Porque la Palabra de Dios es como el alimento que comes diariamente. Después de que Cristo viva en ti, querrás saber más acerca de quien ahora es tu rey. Es en la iglesia dónde encontrarás ese alimento. ¡Además, necesitas mostrarle a todo el mundo que has cambiado de nacionalidad, que ahora perteneces al reino de Dios! Dios quiere que le sirva a él y sólo a él. No escondido, sino en público.
“A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también lo confesaré delante de mi Padre que está en los cielos. Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos.”